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miércoles, 17 de mayo de 2023

¿Qué hace diferente a Uruguay?


La República Oriental del Uruguay es un pequeño país sudamericano (176,000 km2), casi plano (la mayor elevación tiene apenas 500 metros de altura), con escasa población (3.4 millones de personas) con un PIB nominal bastante modesto (US$60 billones - lugar #82 del mundo) y con muy escasos recursos naturales.

La plenillanura es el paisaje típico de Uruguay


Sin embargo, el pequeño país del Cono Sur ha sabido sobresalir, tanto en la región latinoamericana, como a nivel mundial, en una serie de renglones que lo han convertido en un verdadero referente en las últimas décadas.

Además de ser en Latinoamérica el país con mayor PIB nominal per cápita (US$17,000 al 2021 según Banco Mundial), lidera también en tasa de alfabetización (99.8% empate con Cuba, según PNUD), el de menor percepción de corrupción (74 puntos, según CPI[1] 2022 de Transparencia Internacional), menor desigualdad (índice de Gini de 0.380, en 2018 según Banco Mundial), el que otorga mayores garantías civiles y políticas (según Latinobarómetro 2021), de mayor madurez democrática (según The Economist) y de mayor desarrollo del Gobierno Electrónico (según Naciones Unidas).

Pero, ¿qué hizo a Uruguay tan diferente? Veamos primero un resumen de su historia y el detalle de algunos hitos claves que configuraron su perfil como nación.

Su historia, resumida

Antes de la llegada de los españoles, la actual Uruguay estaba principalmente habitada por la tribu charrúa, la mayoría de los cuales fueron eventualmente exterminados o desplazados. Los colonizadores empezaron a llamar a este territorio “Banda Oriental”, el cual estaba comprendido al este del río Uruguay y al norte del Río de la Plata, donde se dedicaron principalmente a la cría de ganado.

Ante el enorme territorio que abarcaba el Virreinato de Perú, lo cual dificultaba las labores de gobierno, la corona española lo dividió para crear el Virreinato del Río de la Plata, el cual incluía territorios de la actual Argentina, Uruguay, Paraguay y Bolivia.

En 1776 fue nombrado virrey de esta región Pedro de Cevallos, cuya principal misión era la de hacer frente a las incursiones portuguesas que pretendían hacerse de los valiosos puertos de la zona.

Durante los siglos XVIII y XIX, Uruguay fue escenario de numerosos conflictos y cambios de dominio, pasando de manos españolas a portuguesas y viceversa. Con la Revolución de Mayo de 1810, surgen las Provincias Unidas del Río de la Plata en sustitución del virreinato, entre las que se encontraba la Provincia Oriental, nombre con el que se le conocía entonces a Uruguay.

José Gervasio Artigas, prócer de Uruguay


Gracias a los esfuerzos del patriota José Gervasio Artigas, los uruguayos lograron autonomía frente a la confederación, cuyo centro político residía en Buenos Aires.

En 1828, tras la Guerra del Brasil, Uruguay se independizó y adoptó una forma de gobierno republicano. Durante gran parte del siglo XIX, el país se vio afectado por luchas internas y conflictos entre los partidos políticos, lo que condujo a períodos de inestabilidad y violencia. Sin embargo, a fines del siglo XIX y principios del XX, Uruguay experimentó un período de estabilidad y prosperidad conocido como la "Belle Époque", impulsado por la modernización económica y social.

En el siglo XX, Uruguay fue sacudido por varios eventos significativos. Durante la dictadura militar que comenzó en 1973, el país sufrió violaciones masivas de los derechos humanos y una fuerte represión. La democracia se restableció en 1985 y Uruguay se embarcó en un proceso de reconciliación y construcción de instituciones democráticas sólidas. A lo largo de las últimas décadas, Uruguay se ha destacado por su énfasis en la educación, la igualdad social y los derechos humanos, lo que le ha valido una reputación de país progresista en la región.

Hitos histórico-políticos que marcaron a Uruguay

A simple vista, el devenir uruguayo desde su colonización ha sido muy parecido al resto de los países de la región. Sin embargo, varios acontecimientos sirvieron para modelar el comportamiento de ese país que poco a poco ha sido perfilándose como un referente internacional. Veamos algunos de los más relevantes:

  • A pesar de la fuerte polarización del país en dos grandes fuerzas políticas desde su mismo nacimiento (Partido Colorado y Partido Nacional), que en muchas ocasiones los enfrentó en una guerra civil, fueron capaces de firmar en 1872 un acuerdo de coparticipación política al finalizar la Revolución de las Lanzas.

José Batlle y Ordóñez 

  • En 1903 asciende al poder José Batlle y Ordóñez (Partido Colorado), quien inició una serie de reformas sociales, electorales y económicas que llevaron a Uruguay a ser considerada para 1915 la “Suiza de América”. Gobernó en dos períodos, no consecutivos, y, aunque tuvo que enfrentar la Revolución de 1904 (de la cual el Partido Colorado salió victorioso), pudo implementar diversas políticas públicas que permitieron al país colocarse tempranamente a la vanguardia en la región:
    • Prohibición del trabajo a menores de 13 años y restricción de horario para menores de 19
    • 40 días de descanso para mujeres embarazadas
    • Descanso obligatorio 1 de cada 7 días
    • Jornada laboral con un tope de 48 horas a la semana y máximo 8 horas al día
    • Indemnización por accidentes laborales y por despido
    • Pensiones para mayores de 65 años y a cualquier edad por invalidez absoluta
    • Estatización y nacionalización de los servicios esenciales
    • Separación de la Iglesia y el Estado (secularización de actos públicos)
    • Aprobación del divorcio por la sola voluntad de la mujer
    • Abolición de la pena de muerte
      Gabriel Terra

  • Creación del Consejo Nacional de Administración en 1919, que funcionó como parte del Poder Ejecutivo junto a la Presidencia de la República hasta 1933, mediante el cual compartían el poder las dos fuerzas políticas principales. El consejo estaba a cargo de los ministerios de Educación, Salud, Obras Públicas, Trabajo, Industria, Hacienda y se encargaba del presupuesto general. Los restantes ministerios (Interior, Relaciones Exteriores y Guerra) estaban a cargo del presidente.
  • La primera gran disrupción en el siglo XX fue la presidencia de Gabriel Terra, quien, bajo el alegato de que había que enfrentar la crisis provocada por la Gran Depresión, impulsó un autogolpe en 1933 que eliminó el Consejo Nacional de Administración (convirtiendo nuevamente la Presidencia de la República en unipersonal) y que lo volvió dictador durante un año. Es así que en 1934 logra aprobar una nueva constitución que le permitió presentarse nuevamente como candidato y ganar por amplia mayoría. Sin embargo, el gobierno de Terra garantizó nuevos derechos al tiempo que pagó la deuda externa, impulsó la cooperativización y una extensa industrialización del país, logrando la autosuficiencia energética. Ya para 1937 Uruguay era el mayor exportador mundial de carne congelada.
    José Mujica, de guerrillero a presidente

  • El Frente Amplio fue fundado en 1971 como fuerza política aglutinadora de los partidos y movimientos políticos de centro e izquierda, que incluso incorporaron al Movimiento de Participación Popular, la organización política que formaron los ex guerrilleros Tupamaros. En las elecciones de ese año logra el 18% de los votos y es proscrito en 1973 a raíz del golpe de Estado de ese año. No fue hasta 1984 que volvió a participar en las elecciones a partir de las cuales empezó a crecer sostenidamente hasta llegar a ser el más votado en 1999 (perdiendo las elecciones nacionales en 2da vuelta); para luego alcanzar el poder en 2005, después del país atravesar una aguda crisis económica en el mandato de Jorge Batlle (Partido Colorado), el cual lograron conservar hasta el 2020. Durante sus 15 años de gobierno, el Frente Amplio pudo enfrentar la crisis económica heredada, acelerar el crecimiento económico, convertir el país en el líder regional en materia de desarrollo digital y profundizar las conquistas sociales, como la campaña contra el tabaquismo, legalización del aborto y el matrimonio igualitario, así como la polémica legalización de la marihuana.

Estos son solo algunos de los acontecimientos político-institucionales que han marcado a los uruguayos. Ahora veamos algunas de las características que mas los distinguen como pueblo.

El comportamiento “suave y ondulado” del uruguayo

Así como es su tierra, el uruguayo autodefine su forma de ser como “suave y ondulada” …sin prisas, sin apuros, sin exabruptos.


Uruguayos tomando mate 

Para ellos, el mate es una bebida omnipresente, es un sinónimo de amistad y unión. Es algo que los acompaña a todos lados, almacenado en un envase térmico, porque siempre es un buen momento para relajarse y compartir, y mejor aún si es en la Rambla frente al mar.

En su gran mayoría son abiertos y receptivos, a las diversidades étnicas y culturales. Viven en armonía y son sumamente respetuosos y tolerantes con el prójimo, sin importar cuan diferente sea.

Son muy puntuales y obedientes a la ley, donde el respeto a las leyes de tránsito es casi unánime y el peatón es rey.


Campaña de sensibilización contra la sal

Cuidan su salud con esmero. Las campañas contra el cigarrillo y la sal llaman la atención por su profusión y apego en lugares públicos, bares y restaurantes.

En las aglomeraciones de personas apenas las personas levantan la voz, mucho menos tocan el claxon en los esporádicos embotellamientos vehiculares…un uruguayo te preguntaría ¿Por qué hacer eso?

Parejas bailando tango en Montevideo


Lo que si pudiera pasar es que te tropieces en cualquier plaza con parejas bailando tango, eso sí. Porque el tango es sagrado, y no hay quien les discuta que Gardel era uruguayo.

Ciertamente, viven y practican una cultura “cero estrés”.

Si alguna vez te preguntaste cómo los uruguayos han logrado ponerse de acuerdo y avanzar en tantos temas, aquí enumeramos algunas posibles respuestas.

Y como decía Benedetti: "Uruguay es una caricia en el corazón, es la nostalgia de un mate compartido, es la melancolía de un atardecer en la playa".

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[1] Corruption Perception Index o Índice de Percepción de Corrupción