Diecisiete años es bastante tiempo, especialmente cuando se trata de predecir cómo será la vida de los seres humanos en una época donde los cambios se suceden con una celeridad inédita. Cronológicamente hablando era como tratar de ver en el año 1996 cómo estaría el mundo hoy en el 2013. La tecnología es un factor de cambio importantísimo, pero no el único. Por tanto, describiremos lo que entendemos más factible que suceda en los órdenes geopolítico, económico y social.
Por supuesto, nada de pretender ser Nostradamus y de ver el futuro en una
bola de cristal. Es solo un ejercicio de
lógica utilizando como premisa las tendencias mundiales de los últimos años.
Estamos en el 2030, y quién
manda ahora?
La mayoría de las naciones que han dominado económicamente al mundo en los últimos
50 años (G-7) seguirán teniendo una enorme incidencia (Estados Unidos,
Alemania, Canadá, Italia, Francia, Japón y Reino Unido). Sin embargo, el gran empuje que han mantenido
en las últimas décadas los países del E-7, los llamados países emergentes, producirán
una nueva correlación de fuerzas. Estos países
son China, Rusia, Brasil, México, India, Indonesia y Turquía. De estos países, sin duda para el 2030 formarán
parte del G-7 China, Rusia e India, muy probablemente a costa de Canadá, Italia
y, tal vez, del Reino Unido. De hecho,
la prestigiosa PricewaterhouseCoopers prevé que la economía bancaria de China
supere a Estados Unidos dentro de 10 años.
El enorme desarrollo económico que Brasil acumulará para esa fecha le
abrirá las puertas para formar parte del Consejo Permanente de Seguridad de la
ONU. México avanzará mucho pero Brasil
lo dejará atrás, ya que los problemas de seguridad y narcotráfico en el suelo
mexicano serán un lastre muy pesado. De
hecho, la pérdida de peso especifico de USA, Canadá y México obligará un
replanteamiento del Tratado de Libre Comercio vigente actualmente en
Norteamérica.
Para Latinoamérica esto tendrá una
incidencia trascendental ya que Brasil tendrá un mayor peso comercial para
nuestros países, convirtiéndose para la mayoría de nosotros en el 2do o 3er
socio comercial.
Con la pérdida de poder hegemónico de Estados Unidos, muy posiblemente se
pacifique el Medio Oriente, aunque a expensas de Israel que tendrá que devolver
gran parte de los territorios arrebatados a los árabes. Sin duda, China se encargará de incrementar
su influencia geopolítica y económicamente en toda Asia, y más allá.
La Unión Europea, aunque sufra varias sacudidas más por la indisciplina
económica de varios de sus integrantes, se fortalecerá eventualmente con la
entrada a la zona euro de Reino Unido, quien históricamente se ha resistido, y
que se verá forzada a aportar a la Unión igual que el resto de los países miembros
dada la pérdida de influencia económica y empezará a pensar más como bloque
económico.
Muy posiblemente el consenso mundial acuerde trasladar la sede de la ONU a
un país más neutral y menos beligerante que Estados Unidos, posiblemente a
Suiza o Brasil. Lo que sí es seguro es que la ONU tendrá cada vez mayor
incidencia y capacidad de intervención en los países en temas concernientes a
medioambiente, bioseguridad, proliferación de armas de destrucción masiva,
hambrunas y epidemias, ya que el mundo para esa época estará profundamente
preocupado por los riesgos y amenazas existentes a escala planetaria.
Y la tecnología del 2030?
Habrá un común denominador de todo el equipamiento tecnológico: Conectividad Universal e inalámbrica. Para esa época el Internet deberá ser de
acceso universal, o, al menos, solamente será cobrado para uploads, es decir,
para subir información, data, mensajes, etc. a la nube. Para descargar data o downstreaming entendemos
que será totalmente gratuito. Deberá
imperar el concepto de que el acceso a Internet es un derecho universal, por
tanto, todos podrán acceder desde su casa, oficina, escuela o universidad a
consultar datos en línea. Estaremos ya
dentro de la Sociedad de la Información y el Conocimiento. Para esa fecha la penetración del Internet a
nivel mundial deberá superar el 75%.
Significa que el trabajo en red a través de los equipos será algo del día a
día. Televisores, neveras y demás aparatos
electrónicos reportando directamente sus fallas a los centros de servicio
autorizados. Neveras haciendo el pedido
directamente a los supermercados en línea y televisores y equipos de música
reconociendo al usuario para presentarles un menú de canales o de canciones
personalizado.
Los vehículos, por igual, estarán dotados de conexión a Internet y
reportaran en línea desperfectos mecánicos, presentaran en tiempo real mapas, obstáculos
en la vía ubicados a cientos de metros de distancia y a los organismos de
seguridad (públicos o privados) les indicará exactamente donde han quedado
averiados o están tratando de asaltarlos.
Los vehículos no podrán ser robados porque pueden ser monitoreados y
desactivados a control remoto en caso de robo, y sus cristales delanteros en la
parte interior servirán de pantallas de proyección de información útil para el
conductor y los pasajeros.
Las PCs y laptops serán cosa del pasado, al igual que CDs y DVDs. Ya toda multimedia será on line por paga o
gratuita. El concepto de tableta se impondrá con una nueva característica: Serán enrollables y mucho más fácil de
cargar. En un solo equipo será posible
tener comunicación telefónica, tableta con pantalla touch o teclado proyectado
tipo holograma y podrá ser desenrollado para ampliar la pantalla al tamaño
deseado según lo que se quiera hacer. Dentro de 17 años el ancho de banda promedio deberá
superar los 50 mbps y deberá estar desarrollada la tecnología de proyectar imágenes
en el aire tipo holograma.
Para esa época deberán haberse desarrollado tejidos sintéticos más
complejos y económicos para confeccionar la ropa, que protegerán a las personas
de temporadas de calor y de frio cada vez más extremas. Recordemos que dentro de 17 años el clima
será todavía más impredecible por el cambio climático y el daño a los
ecosistemas en todo el mundo.
Estaremos mejor?
Esa es una pregunta difícil de responder.
Lo que sí es seguro es que muchísimas enfermedades que hoy diezman
poblaciones enteras serán controladas y hasta erradicadas para el 2030. El crecimiento poblacional desmedido estará casi
resuelto, aunque ya el problema en algunos países será el de un serio
envejecimiento de la población, dado las décadas de tasa de crecimiento
poblacional casi llegando a 0. Ocurrirá
en la mayor parte de Europa y la propia China sufrirá estos efectos. Latinoamérica y la región Indochina en Asia
serán los que mayores inmigrantes jóvenes aporten a otras naciones y, sin
dudas, el español se consolidará como una de las tres lenguas más habladas en
todo el mundo.
Para el 2030 ya el hombre habrá llegado a Marte y en la Luna existirán las
primeras estaciones experimentales. Muy
probablemente ya hayan retornado muestras desde las lunas de Júpiter o Saturno
de que prueben que existe vida microbiana allá y ya se habrá completado toda la
evidencia fósil de que las especies biológicas de hoy son producto de una lenta
y sostenida evolución, incluyendo los humanos.
Para esa fecha las religiones (algunas de ellas) estarán más cercanas a
la ciencia, ya que no les quedará de otra.
Cada vez estarán más convencidas de que las leyes del Universo no tienen
porque contradecir a Dios, ni viceversa, y que todo lo que ocurre obedece a
esas leyes y no al capricho o voluntad de un ser sentado en su trono buscando
premiar o castigar a sus súbditos.
Por supuesto, seguirán las penurias en los países más pobres, aunque en
muchos será en menor escala. También
grandes naciones hoy sufrirán escaseces y calamidades que creían superadas hace
más de 100 años. A pesar de los avances,
seguirá la desesperanza y las perspectivas negativas del futuro en la población,
el Mesías tampoco habrá llegado todavía mientras que los humanos seguirán
haciendo un vano intento por crear su paraíso en la Tierra. Pero, como siempre, habrá gente optimista
mirando hacia delante, sabiendo que dentro de nosotros mismos está la fuerza e
inteligencia para construir el mejor mundo posible.
Me gusta es un futuro muy optimista para latinoamerica
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